Admiro a quienes luchan sin esperar recompensa

A pesar de haber nacido en la ciudad de Quito, María Paula Romo vivió en Loja desde sus 6 años hasta cumplir la mayoría de edad. Sus estudios los realizó en la Escuela Santa Mariana de Jesús y la secundaria en La Inmaculada, en la ciudad de Loja. Por la lucha constante a favor de la justicia continua sus estudios universitarios en Quito, en la Universidad San Francisco donde obtuvo el título de Abogada. Además fue Presidenta del gobierno estudiantil.

Pero sus estudios no terminaron ahí, tiene una maestría en Gobierno y Administración Publica y un curso de postgrado en Derecho Constitucional el cual lo realizó en la Universidad de Salamanca (España).

En el ámbito laboral ha realizado varias consultorías, abogada en libre ejercicio, profesora universitaria y de postgrado en la Universidad San Francisco de Quito, en la Universidad Central del Ecuador y en el Instituto de Altos Estudios Nacionales.

Desde los 22 años ha ejercido la docencia, algo que extraña, porque de una u otra forma le ha permitido interactuar con la gente y por medio de esta enseñarles a sus alumnos que el derecho en el país puede ser cuestionado y cambiado.

A sus 28 años, es la Presidenta de la Comisión Civil y Penal, de la Comisión Legislativa y Fiscalización de la Asamblea Nacional y Miembro de la Ruptura de los 25, es Asambleísta en representación de la provincia de Pichincha, por las listas 35, Movimiento País, ratificada en su cargo luego de las pasadas elecciones.

María Paula se considera amante de la lectura, puesto que cree que la lectura es la principal vía de escape para su agitada vida. Ahora que la misma gira alrededor de la política, trata de leer varios libros acerca de esto.

Admira a la gente que lucha a diario por sus derechos, por sobrevivir y sacar adelante a los suyos, sin esperar a cambio ninguna recompensa, ni una primera plana, desde la Señora Rosita que trabaja en su casa hasta su madre, por la valentía que ha demostrado durante toda su vida y el ejemplo que le ha dado ya que con 4 hijos saco su titulo de medica y hasta la fecha sigue trabajando por quienes más lo necesitan.

Durante la construcción de la nueva Constitución trabajaba seis días a la semana, 18 horas cada día, a pesar de que sus inicios en la política fueron criticando al poder del cual ahora es parte importante.

A pesar de dedicar gran parte de su tiempo a la Asamblea, manifiesta que Ruptura de los 25 no ha desaparecido sin sigue en construcción, pues tienen compañeros muy entusiastas de entre 16 y 17 años y que observan sus discusiones, y salen los fines de semana a contarle a la gente lo que pasa en la Asamblea y plantean que “Ruptura” debe seguir siendo lo que era.
Al interior de la Asamblea Constituyente hace parte de la Mesa de Legislación y Fiscalización y fue elegida como su vicepresidenta.